lunes, 5 de agosto de 2013

SÉPTIMO PASO

SÉPTIMO PASO.
“HUMILDEMENTE LE PEDIMOS A DIOS QUE NOS LIBRASE DE NUESTROS DEFECTOS DE CARÁCTER”.
Como resultado de nuestro trabajo en el sexto paso, estábamos fortalecidos en nuestra resolución de buscar cambiar nuestras vidas. Vimos el daño que nuestros defectos habían causado. Aun así nuestros viejos patrones se pegaban a nosotros como goma, una vez más nos encontramos en una encrucijada y el camino se nos rebeló otra vez. El paso siete nos ofrece la llave para el uso apropiado de la voluntad. Pedir ayuda a nuestro Poder Superior.
HUMILDEMENTE LE PEDIMOS A DIOS.
Nuestra primera tarea fue descubrir el verdadero significado de la palabra humildad. Palabras como servicial, resignación y timidez no funcionaron para nosotros. Tampoco lo hizo la creencia de que humildad es un rasgo de debilidad que debe resistir sea toda costa.
Después de muchas consideraciones definimos HUMILDAD, como libertad del falso orgullo y la arrogancia.
La verdadera humildad nos permitió ver las cosas como realmente eran. No le enseñaríamos a nuestro Poder Superior a eliminar nuestros defectos. Tampoco se lo rogaríamos. En su lugar, gentil y pasivamente se lo pediríamos. A pesar de que solo un Poder Superior a nosotros mismos podría liberarnos de nuestros defectos, nuestra cooperación también fue necesaria .
Aprendimos que el significado del verdadero cambio para nosotros se llevaría a cabo, formando un equipo de trabajo con nuestro Poder Superior, recordando todo el tiempo, que el socio principal es Dios y no nosotros.
QUE NOS LIBRASE DE NUESTROS DEFECTOS.
Una vida sin defectos de carácter era imposible de manejar. Nos preguntábamos que pareceríamos sin ellos. Decidimos descubrirlo ¿pero cómo?, para nuestra respuesta nos apoyamos en miembros de CoDA que ya caminaron por este sendero. Se nos recomendó que diéramos este paso con nuestro padrino o con un amigo confiable de CoDA, alguien que haya trabajado este paso con algún éxito.
También se nos sugirió que empezáramos nuestra petición a Dios con una oración. La oración es la serenidad, funciona para algunos. Otros crearon su propia oración. Lo que hicimos fue entrar en contacto con el Dios de nuestro entendimiento y decirle en esencia: “AQUÍ ESTOY DIOS, CON MIS DEFECTOS Y TODO, Y ESTOY DISPUESTO A QUE ME LIBRES DE ELLOS COMO TU CREAS NECESARIO, GRACIAS”. Cuando nos encontramos en las angustias de alguno de estos defectos de carácter, podemos en ese momento, pedirle a Dios que nos libere de él .
Algunos de nosotros descubrimos que seguíamos aferrados a un defecto en particular, temerosos de seguir adelante sin el, nos dirigimos nuevamente al sexto paso y una vez más pedimos a nuestro Poder Superior la dirección, para estar enteramente dispuestos a dejar que eliminase todos nuestros defectos.
Habiendo pedido a Dios que nos librase de nuestros defectos de carácter muchos de nosotros experimentamos su pérdida con tristeza. Nunca esperamos sentir pena o dolor por lo que habíamos llegado a creer que era deteriorante para nuestra felicidad.
Empezamos a ver que estos VIEJOS AMIGOS nos habían servido bien. Como a un salvavidas de la infancia que ya no nos queda y hacemos a un lado. Con la ayuda de Dios, estábamos aprendiendo a nadar.
En este momento le pido a mi Poder Superior, me libre de todos mis defectos, librándome de la CARGA de mi pasado. En este momento pongo mi mano en la confianza de Dios, que el vacío que siento se ha llenado con el amor incondicional de mi Poder Superior hacia mí y los de mi alrededor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario