lunes, 26 de agosto de 2013

9° PASO

REPARAMOS DIRECTAMENTE A LAS PERSONAS QUE OFENDIMOS CUANDO
FUE POSIBLE EXCEPTO CUANDO AL HACERLO PUDIÉRAMOS LASTIMAR A
ELLOS MISMOS O A OTRAS PERSONAS.
Para muchos de nosotros en Codependientes Anónimos nuestro rol
más cómodo había sido de víctima. Habíamos esperado muchos años a que
alguien cualquiera nos hiciera reparaciones a nosotros.
El noveno paso nos trajo al momento de la verdad, nos pedía que
hiciéramos esa acción particular NOSOTROS.
El como trabajamos este paso se convirtió en la medida de nuestra
recuperación. Las llaves para nuestro éxito reconvirtió en la medida de
nuestra recuperación. Las llaves para nuestro éxito serían sensibilidad, buen
juicio y valor. Aún así, las palabras “Poder Superior ” no eran mencionadas
en el noveno paso, muchos sentimos que éste era el momento para buscar la
guía espiritual.
EN DONDE FUE POSIBLE … HICIMOS REPARACIONES DIRECTAS. Por
ser nuestro nombre el primero de la lista de reparaciones, cada uno de
nosotros tuvo la oportunidad de practicar esta importante tarea consigo
mismo antes de hacer reparaciones a otras personas. La pregunta que nos
hicimos ante esto fue ¿Cómo me gustaría a mí que repararan los daños que
sufrí? ¿Cómo un simple “lo siento ” sería suficiente? La respuesta fue NO.
Lo que la mayoría de nosotros queríamos a manera de reparación es
que la otra persona reconociera su parte en habernos dañado. También
queríamos que nuestros sentimientos y percepción del incidente fuerareconocida. Y si habíamos de continuar la relación con esa persona,
queríamos que en adelante se comportaran de manera diferente con
nosotros.
Sieso es lo que queríamos de los demás ¿podíamos pedir menos de
nosotros mismos?
Y así llegamos a un método para hacer reparaciones – el reconocer y
hacernos responsables de nuestro comportamiento dañino y reconocer los
sentimientos de la otra persona en el asunto y seguir a ello con un cambio en
nuestro propio comportamiento.
Estas reparaciones deberán ser hechas en persona dentro de lo
posible, de otro modo, se nos sugirió ponerlas por escrito.
Si no fuéramos capaces de encontrar a alguien a quien reparar daños,
nos fue recomendado que permaneciéramos deseosos hasta el tiempo en que
esa persona fuera encontrada. En el caso de deber reparaciones a alguna
persona que ya hubiera muerto, uno de nuestros padres, tal vez, descubrimos
q ue el hacer un servicio a alguna persona en circunstancias similares, era
una buena alternativa.
EXCEPTO CUANDO AL HACERLO PUDIÉRAMOS PERJUDICAR A
ELLOS MISMOS O A OTROS. Observamos esta declaración de diferentes
maneras, y nos incluimos a nosotros mismos en la palabra OTROS.
No podíamos permitirnos el entrar en esta reparación de daños con las
expectativas de aquellos en quienes recaímos la reparación. Al hacerlo nos
podíamos lastimar a nosotros mismos con la decepción y posiblemente con el
resentimiento.
Ot ro LUJO que no nos pudimos dar es el miedo a ser recriminados. Si
nosotros todavía dábamos a los demás el poder de lastimarnos con sus
reacciones, el resultado sería seguramente de prejuicio para nosotros.
Algunos de nosotros vimos que hacer ciertas reparaciones podía
resultar en la pérdida de nuestro trabajo o posiblemente en caer preso.
Nosotros teníamos familiares u otras personas que dependían de nosotros y
que podían salir lastimados si tomábamos esa acción. O tal vez lo que
percibíamos como consecuencias horribles para nosotros que podrían venir
como resultado de hacer reparaciones directas. En todos estos casos nos fue
sugerido discutir esas reparaciones con nuestro padrino, algún amigo de
confianza en CoDA, o con nuestro consejero espiritual.
Tal vez nuestras reparaciones crearían “una lata de gusanos ” donde
nosotros pensamos que no la había. Con frecuencia este tipo dereparaciones involucraba promiscuidad, adulterio o abuso sexual. Revelar
nuestras malas acciones podría causar daños graves o vergüenza en otras
personas. Otra vez, fuimos dirigidos a discutir estas dificultades con algún
amigo(a) o nuestro padrino. Algunas veces en estos casos nuestro cambio de
comportamiento, seguido de alguna forma de servicio apropiado fue la mejor
reparación posible. Frecuentemente, descubrimos que nuestros miedos eran
exagerados y que una reparación directa era la mejor manera para todos los
interesados de acercarnos a este asunto.
En este momento, yo confío en mi Poder Superior para que me guíe en
hacer reparaciones honestas y sinceras. En este momento, yo experimento mi
gratitud para Codependientes Anónimos y los doce pasos de recuperación
conociendo que como yo estoy dispuesto a vivir este programa, compartir la
hermandad, y caminar con Dios, yo soy libre

No hay comentarios:

Publicar un comentario