La felicidad es un objetivo general aunque difuso, y la alegría es su manifestación más directa. Las personas alegres perciben el mundo como un lugar mejor, toman decisiones más fácilmente y se declaran más satisfechas con su vida. Aprende a convertir en rutina el estar alegre y a vigorizar tu autoestima.


Pasos

1

Modera tus exigencias. Una búsqueda ansiosa de mayores satisfacciones, puede conducirte a la pérdida del equilibrio interno que facilite el acercamiento hacia la verdadera alegría. Por ello, procura vivir con intensidad el presente, aprendiendo a disfrutar de las cosas pequeñas y cotidianas.

2

Dile adiós a quejas inútiles. Lamentarse constantemente por algo que se ha roto, por el estado del clima, por un robo, sólo te hará perder tu preciado tiempo. Aprende a aceptar lo irremediable, ya que una actitud de protesta por algo que no tiene solución, sólo te privará de la alegría de vivir.

3

Busca en tu ocupación diaria fuentes de alegría. En la actividad cotidiana se ve reflejada nuestra vitalidad, capacidad y creatividad. Procura disfrutar de lo que haces, entrégate, transforma las obligaciones en oportunidades de expresión y búsqueda de motivos para estar alegre.

4

Descubre el lado bueno de las cosas. Buscar lo positivo que nos presenta cada acontecimiento es una determinación personal. Deja de lamentarte por lo que no tienes y comienza a valorar aquello que sí posees, has alcanzado o puedes alcanzar.

5

Contagia la alegría. Ser una persona alegre es una elección que va a expresarse en cada ámbito de tu vida y en cada parte de tu cuerpo. Anímate a implementar colores vivos en tu vestimenta y en tu casa, baila, canta. Haz que el júbilo que sientes dentro, aflore al exterior y contagie a quienes te rodean.

6

Recuerda que ser alegre fortalece tu autoestima. Una vida guiada por el entusiasmo de potenciar la alegría del vivir es la clave para sentirse bien con uno mismo. Con la alegría, como componente infaltable en tus días, podrás desarrollar un alto nivel de autoestima, favoreciendo tu salud física y mental.

Importante

• Ser una persona alegre no significa estar eufórico, divertido o “brincando” constantemente. Tiene que ver con un estado que promueve el bienestar físico y psíquico.
• Ser una persona alegre es una cuestión de decisión del hoy, del aquí y ahora. Anímate y fortalece tu autoestima gracias a tu sabia elección.